viernes, 10 de enero de 2014

Sintomas de los dolores de crecimiento

Los niños con dolores de crecimiento típicamente tienen dolor en sus piernas, tarde en el día o en medio de la noche. Pueden ser especialmente fuertes después de un día de intensa actividad física, pero en realidad no se sabe lo que los causa.

Otros factores que pueden apuntar a dolores de crecimiento como una causa de dolor en la pierna de un niño un masaje ayuda a la zona de dolor, mientras que si había una lesión u otra condición médica que causa el dolor, tocar o masajear la zona probablemente puede hacer que el dolor empeore. Además, los niños con problemas de crecimiento por lo general no tienen ningún otro síntoma, como la pérdida de peso, cojera, fiebre, o hinchazón de las articulaciones y el dolor no deben limitar su actividad.


Los dolores de crecimiento también ocurren comúnmente:

• En ambas piernas
• En la parte frontal del muslo, los músculos de la pantorrilla, y los músculos en la parte posterior de la rodilla
• En niños entre las edades de 3 y 5 y luego 8 y 12 años
• En más de 30 por ciento de los niños

Dado que nada parece ayudar a su hijo, lo mejor que puede hacer es llevarlo con su medico ortopedista pediatra para una evaluación. Aunque a menudo atribuimos dolores de crecimiento con el dolor en las piernas, hay otras condiciones que pueden causar dolor en las piernas, y pueden necesitar análisis de sangre o una radiografía para estar seguro de que lo que realmente son dolores de crecimiento.

Si cree que nada parece ayudar a su hijo porque el dolor siempre regresa, entonces debe ser paciente y esperar. Si usted es capaz de tratar el dolor entoncessu hijo estara bien hasta que empiece de nuevo, esto es normal, dependiendo de la frecuencia con la que está sucediendo. Puede ayudar a darle ibuprofeno (Motrin o Advil) para el dolor y si ha tenido un día muy activo, al igual que después de la práctica de fútbol o otras activodades deportivas que practique, para ver si así se mantiene sin dolor incluso desde el inicio de la noche. Usted no debe hacer esto cada noche o en la mayoría de las noches sin consultar a su ortopedista pediatra primero.

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