viernes, 16 de mayo de 2014

Ortopedia Pediátrica D.F.

Hay muchos padecimientos que trata la ortopedia pediátrica de manera diferente. Algunas son congénitas, es decir, que los ha tenido desde su nacimiento y se inició en el vientre, mientras que otros se presentan más adelante. Hay fracturas en niños, las condiciones de la columna vertebral, tumores de tejidos blandos o huesos, y problemas de cadera y rodilla. Algunos de ellos son benignos y desaparecen por sí solos, mientras que otros son graves y requieren atención inmediata. Si le preocupa que su hijo tenga un problema ortopédico, deje que su ortopedista pediatra lo trate ya que él tiene la experiencia adecuada y puede descartar algunos de los problemas graves.


Algunos de los problemas en ortopedia pediátrica más frecuentes en los niños son:

La contracción muscular del cuello, con la inclinación de la cabeza hacia el lado afectado, más común en las grandes, los bebés primogénitos con trabajo de parto prolongado. Por lo general desaparece con manipulación suave durante los primeros meses.

Una dislocación del hombro de un bebé demasiado grande tratando de conseguir a través de un espacio demasiado pequeño. Se llama distocia de hombro, esto es fácil de tratar después del nacimiento.

Un tipo de fracturas en niños muy es la fractura de clavícula, la cual es rara pero si se trata adecuadamente, es curada.

Otros problemas ortopédicos infantiles incluyen:

Dedos adicionales en las manos o pies: Nacer con un sexto dedo no es infrecuente. Los dedos adicionales pueden automáticamente caerse por sí solos o ser extirpados quirúrgicamente.

Sindactilia: Esta es una conexión congénita o fusión entre dedos. La mayoría se reparan cuando el niño tiene más de un año, este tratamiento se realiza bajo anestesia.

Raquitismo: Es un extremo arqueamiento de las piernas causada por la resistencia de un cuerpo a la vitamina D o la ingesta prolongada insuficiente de vitamina D3. El arqueamiento leve de las piernas es común en la mayoría de los niños y se cura. El raquitismo se ve a menudo en los niños que son también pequeños. Estos niños no necesitan tener un soporte, pero necesitan apoyo nutricional.

El pie zambo: Esta es una deformidad congénita verdadera donde se involucran todos los huesos del pie. A los bebés con pie equino varo o pie zambo se le pone un molde el primer año o menos de vida para ayudar a girar el pie y mejorar la flexibilidad a largo plazo.

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